Desde Kampot a Sihanukville separados por 100 km, nos trasladamos en microbús de 14 plazas, nos recoge en la puerta del guesthouse, y a través de la Nh3 después de algo de más de 2 horas llegamos a nuestro destino.

El paisaje que contemplamos es espectacular.

Aunque la carretera en algunos tramos no podemos decir que esté terminada.

Sihanukville nos recibe con una torrencial lluvia, propia del trópico, que en un intervalo de medio hora convierte las calles en rios.

Por suerte el microbús nos lleva hasta la puerta de nuestro alojamiento.

Esta ciudad es famosa por sus playas, con vida nocturna, y excursiones a las islas cercanas. No tiene otro atractivo, así que nos dedicamos a pasar el día totalmente relajados.

Comiendo un rico curry rojo

Comprando fruta

Viendo la última moda

Máquinas de coser ultramodernas

Y meditando sobre lo humano, lo divino, lo mundano ….y seguimos buscandanos.

A las 8 de la tarde nos recoge un bus-hotel, que después de unas 12 horas nos llevará al siguiente destino.